El pasado día 17 dio comienzo a la novena de Santa Ana, inicio de la cuenta atrás para las fiestas de nuestra ciudad en honor de nuestra Patrona.
La catedral luce espléndida en esta ocasión y los tudelanos acuden a este acto diario, unos por devoción, los más por tradición, a escuchar los Gozos a Santa Ana interpretados por voluntarios nutridos en su mayor parte por el Coro Joaquín Gaztambide de Tudela, acompañados por músicos del Conservatorio Fernando Remacha..
Los Gozos son canciones populares y una de sus características son la territorialidad o localización y son frecuentes las referencias a poblaciones. Esto es de aplicación a los que se cantan en Tudela.
Los Gozos a Santa Ana gozan (valga la redundancia) de un favor excepcional desde los remotos tiempos en que la abuela de Jesús fue proclamada patrona de esta ciudad en el año 1530, aunque según testamento otorgado en Pamplona por el rey Teobaldo II de Navarra su fiesta anual se documenta en 1270.
El texto de la novena que se recita es antiquísimo, posiblemente de los años en que se proclamó el patronato, pero son del autor de zarzuelas Barbieri los versos actuales que arregló a petición de su amigo Joaquín Gaztambide
Llena el mundo el resplandor
de tu gracia soberana:
¡Gloria a Ti, dulce Santa Ana,
que atesoras tal valor!
Hasta 1857 contaba la Santa sólo con tres sencillas novenas que compuso Pablo Rubla sin ninguna pretensión. El 19 de Julio de 1857 se estrenó con un gran éxito la de Joaquín Gaztambide y desde entonces quedó reconocida como indispensable.
No lograron debilitar a ésta las posteriores de Ramón Enguita (1864), de José Benito, de Manuel Ramírez y la de Celestino Vila, que también alcanzó gran popularidad.
Hoy día se alternan las de Joaquín Gaztambide y Celestino Vila. Se interpreta también algún día la de Tomás Jiménez (Clarico), autor también del himno a Santa Ana y la del actual director del coro Joaquín Gaztambide José María Lafuente, muy orquestal que no termina de convencer.
No obstante, a pesar de la popularidad de la versión de Celestino Vila, la novena del gran músico tudelano Joaquín Gaztambide y Garbayo es considerada la clásica, la legítima, la verdaderamente tudelana. Una gran composición a pesar del breve tiempo en que fue concebida: El 17 de Abril se le solicitó, el 15 de Julio llegó a Tudela la partitura y casi sin tiempo para el ensayo se estrenó cuatro días más tarde.
A mí personalmente me agradaría que, sin dejar de lado la magnífica de Gaztambide, se fueran interpretando de vez en cuando las de los demás compositores porque todos pusieron gran ilusión y amor en sus obras en honor de Nuestra Patrona.
BIBLIOGRAFIA: Apuntes Tudelanos (Mariano Sáinz)