lunes, 1 de octubre de 2018

Luna llena




Luna llena, rubicunda,
que dibujas de amapolas
los atardeceres rojos
del lecho donde te alojas.
Viajas en carro de nácar,
ese que mece las ondas
cuando cantan las sirenas
y se iluminan las sombras.
Recalas en los remansos
que velan las caracolas
soñando con musgos tersos,
con besos de arena y ola.
Y cuando llegas al cénit,
donde los sueños se alojan,
maquillas tu rostro níveo
con alboradas redondas.


Felipe Tajafuerte. 2018


5 comentarios:

  1. Buen romance le haces a la luna llena, Felipe.
    Un abrazo.

    Te envié un mail, no sé si lo has abierto.

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    Respuestas
    1. Gracias, Chelo. No había abierto ese correo porque es el que utilizo para el libro. Besos

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  2. Estupendo como cada vez, Felipe. En especial me gustó eso de "soñando con musgos tersos, con besos de arena y ola".

    Saludo austral.

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  3. Me gusta el poema bien hecho, cuando el corazón está tranquilo.
    Saludos.

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Tu comentario es bien recibido aunque sea anónimo. Muchas gracias por tu atención.

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